Introducción

El próximo domingo 06 de junio un total de 93 millones 528 mil 473 mexicanos, residentes en territorio nacional y extranjero, votarán para elegir a sus representantes en las elecciones más grandes del país, en las cuales se elegirán, entre otros, una diputación migrante.

Evidentemente, el voto es uno de los pilares fundamentales de la democracia y este, a medida que la tecnología avanza, se ha modernizado. Si quieres saber que es el voto electrónico y que cambios provocará la tecnología en las elecciones en el futuro quédate con nosotros.

El voto electrónico consiste tanto en emitir votos mediante un dispositivo electrónico como en usar medios tecnológicos para contar los mismos. El también llamado e-voting puede ser de dos tipos:

• El voto remoto, el cual alude a la votación en internet, en este el votante no se debe desplazar a ningún lado para realizarse. El lado negativo es que el votante puede ser fácilmente suplantado.
• El voto in situ, en este debemos desplazarnos a un lugar específico para realizarlo. Se pueden utilizar las máquinas siguientes:
o DRE (Registro Electrónico Directo). El votante marca su opción directamente en la máquina.
o OMR (Reconocimiento óptico de marcas). Leen el papel donde se marcó el voto y registran
o Impresoras de papeleta electrónica. Este es un sistema mixto pues une las máquinas DRE y las maquinas OMR. En este caso, la persona vota a través de la máquina DRE, y ella le entrega al votante un documento que posteriormente es pasado a través de la maquina OMR. Este es un sistema muy efectivo, pero costoso.

En México contamos con importantes avances en el uso de urnas electrónicas, estas se utilizaron por primera vez en las elecciones locales de Coahuila en 2005, y las de Jalisco en 2006, una de las peculiaridades de estas es el “testigo del voto”, considerado el candado de seguridad mas importante de este sistema, consiste en la impresión de un comprobante del voto electrónico, mismo que se deposita en una urna transparente para cotejar en caso de ser necesario.

Otro ejemplo del aprovechamiento de la tecnología en el proceso electoral mexicano es la plataforma digital que el INE puso a disposición de los votantes, en la cual pueden ubicar, sin mayor esfuerzo, la casilla que les corresponde.

Algunos de los avances que se auguran para el futuro son los siguientes:

• La desaparición de las papeletas o boletas electorales de papel, lo cual resultará benéfico ya que retira el conteo a mano que puede ser erróneo y dará paso a opciones más ecológicas económicas y confiables,
• La desaparición de las casillas, estas serían reemplazadas por sitios electrónicos seguros, lo cual, con el despunte de los métodos de votación electrónicos y la votación por internet serían una realidad.
• Identificación electrónica, el uso de nuestros datos biométricos, si bien ha sido muy criticado por la capacidad de mantenerlos seguros, sería una alternativa a las tarjetas de identidad comunes.

Otras formas en las que la tecnología puede beneficiar el proceso electoral sería la rápida transmisión de los procesos electorales, capacitación virtual de funcionarios de casilla, seguimiento GPS de material electoral, inscripción más eficiente en el padrón electoral, facilidad para denunciar delitos electorales, sistematizar el seguimiento del financiamiento de campañas, entre otros.

Conclusiones

Cada día la tecnología cambia y ayuda a mejorar los procesos que teníamos establecidos, lo cual, en un futuro, facilitará y reducirá costos en el proceso democrático de cualquier país y sobre todo dará seguridad a los ciudadanos.